Directora artística y administrativa del Mozarteum Argentino desde el año 1987, Gisela Timmermann es una figura reconocida internacionalmente por sus aptitudes y profesionalismo en lo que hace a la promoción y producción musical.

Nacida en Hamburgo, Alemania, se estableció en la Argentina junto a sus padres, el químico alemán Dr. Ernesto Timmermann y María Luisa Erica Peters, descendiente de una tradicional familia alemana afincada en el país desde inicios del siglo XIX. Fue aquí en Buenos Aires en donde Gisela Timmermann realizó sus estudios de educación general manifestando, desde temprana edad, una gran inclinación hacia la música.

Melómana apasionada desde su juventud concurría asiduamente a conciertos y reuniones musicales como, por ejemplo, aquellas inolvidables veladas organizadas por la familia Rosenthal. A través de estas experiencias musicales y de sus estudios en violín bajo la guía del maestro húngaro Ernesto Barnay, entró en contacto con el repertorio musical universal.

Estudiante de farmacia y bioquímica, inició su formación en el área ejecutiva desempeñándose en el área de publicidad de los Laboratorios Lepetit, camino que prosiguió en Europa al instalarse en Munich tras haber sido contratada para trabajar en el departamento de publicidad de las editoriales Rundschau y Verlag Mensch und Arbeit.

Gisela Timmermann regresó a la Argentina en 1967 para hacerse cargo de la producción del Teatro de Cámara de Alemania en sus giras americanas. Esta eminente institución, subvencionada por el Gobierno Federal de ese país y bajo la dirección de Reinhold K. Olszewski, realizaba extensas giras por toda América Latina presentando numerosos estrenos junto a las grandes obras del repertorio teatral universal.

Los cinco años de trabajo junto a esta compañía otorgaron a Gisela Timmermann una invaluable experiencia en lo que hace a todos los aspectos que conforman el contexto del mundo del teatro desde un conocimiento intrínseco en lo que hace a la producción teatral y la organización de giras internacionales.

En el año 1973 su pasión por la música, su experticia en las áreas de producción y publicidad y su habilidad en el manejo de diversos idiomas pudieron, finalmente, volcarse en un mismo proyecto profesional dentro del Mozarteum Argentino. El Ambito de la música clásica sería, desde ese entonces, la fuente de su mayor inspiración y entrega.

Junto a quien fuera durante más de cinco décadas la Presidenta de la institución, Jeannette Arata de Erize, Gisela Timmermann consolidó la imagen internacional de la institución y logró su expansión hasta su nivel actual. Llevando adelante la contratación de artistas de primer nivel en la escena mundial y promoviendo la realización de grandes giras sudamericanas de las más destacadas orquestas, obtuvo una posición y reconocimiento privilegiado en el mundo de la música clásica internacional. Por sus aportes al campo artístico musical ha sido distinguida por los gobiernos de la República Federal de Alemania y la República de Austria, como así también por la misma ciudad de Viena.

Desde la institución ha podido concretar también numerosos proyectos para la promoción y difusión de la música clásica en diversas ciudades del interior del país y respaldando, además, en forma permanente a los jóvenes talentos musicales de la Argentina a través del desarrollo del programa de becas que la institución lleva adelante en la actualidad.